Los beneficios de Internet son incontables, pero también sus peligros. ‘El lado oscuro de la red’ es el nuevo libro de Misha Glenny donde nos muestra la facilidad que tienen los cibercriminales para asaltar a cualquier ciudadano que se desenvuelva por la red, por eso Glenny lanza una advertencia: “debemos aprender a usar Internet para poder protegernos”. En el céntrico hotel madrileño de Las Letras, el autor londinense recordó que cuando nos entra un virus en el ordenador podemos afectar a nuestros contactos, de ahí que, según confesó, la principal motivación que le llevó a escribir su libro fue “la necesidad de que la gente se concienciase de los riesgos y peligros de la red”.
Estos no solo se limitan a la vida de las personas sino que también tienen repercusión en el trabajo del periodista. El antiguo corresponsal de la BBC y CNN comentó que él mismo cayó hace poco en la trampa de Internet: “basándome en un informe publiqué en Twitter que con las Administraciones republicanas (en EEUU) el déficit se disparó más que con las demócratas. Al rato me replicó un seguidor mostrándome un artículo del Washington Post que desmentía mi teoría”. Glenny subrayó la importancia de comprobar todas las fuentes ya que no todas son fiables: “la BBC trabaja mucho su marca y por tanto sus periodistas no pueden publicar nada sin haberlo cotejado con otras fuentes”.
En referencia a su anterior libro, McMafia, Misha Glenny aseguró que recibió alguna amenaza “pero eran aisladas y no violentas”. Eso no le ha quitado el ímpetu para seguir investigando asuntos candentes. Ahora la polémica se cierne sobre Occidente en relación con la piratería. Ley Sinde, PIPA y SOPA en EEUU, ACTA en la UE… y de telón de fondo Megaupload, lo cual para el autor “es curioso y muy relevante” que sucedan todo simultáneamente y añade que el juicio al dueño de Megaupload va a ser “determinante para las futuras leyes que se desarrollen contra la piratería”.
La regulación de internet es uno de los debates de mayor calado estructural e intelectual que sostiene la sociedad contemporánea pero como sostiene Glenny, “esto no se trata de chavales que se descargan películas sino que alcanza el nivel político: EEUU y Occidente ha invertido mucho dinero en producción mientras que China se ha ido aprovechando a copiar sin soltar un duro”. La sensación es que todo está en el aire pero que algunas piezas del puzle empiezan a encajar. Lo iremos viendo, y viviendo.
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