El pasado 5 de marzo se celebró en la Real Casa de Correos de Madrid el acto de entrega del II Premio Francisco Umbral al escritor Luis Mateo Diez por su novela "La cabeza en llamas". La historiadora y académica Carmen Iglesias, presidenta del jurado,
comenzó el acto con unas breves palabras sobre el libro escogido: "Luis
Mateo Díez se define como un
hombre trágico, pero yo quiero añadir que también es un creador de alto
sentido irónico", comentó.El autor agradeció recibir dicho premio, dotado con 12.000 euros y una estatua diseñada por Alberto Corazón, por "la extraordinaria calidad de su prosa y la hondura psicológica y humanística de los personajes que pueblan sus cuatro historias, además del carácter humorístico de la obra", según destacó el jurado. "Es un honor ganar el premio Umbral porque fue uno de los escritores que se definen por su escritura y es el recuerdo que nos queda, el de su escritura", añadió el escritor leonés.
En su discurso de agradecimiento, Luis Mateo Díez, afirmó haber escrito este libro al cumplir 70 años como una forma de "felicitar" a sus lectores. "La mayor satisfacción es que hay mucha gente que me lee y se acuerda de mis personajes y, a veces, no de mi nombre", señaló Luis Mateo Díez poco antes de recoger el galardón.
No se quiso tampoco olvidar de la persona que da nombre al premio. "Umbral era una escritura comprometida con la realidad de este país", tras lo cual agregó que era "una escritura de insólita capacidad narrativa, periodística y lírica".
Tras la entrega del premio se celebró un interesante coloquio literario entre Luis Mateo Díez y Manuel Longares, ganador del premio en su pasada edición, que estuvo moderado por los miembros del jurado Santos Sanz Villanueva y Fernando Rodríguez Lafuente.
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