martes, 23 de enero de 2007

Los otros viajes.


Jangel nos ha hablado del foro de viajes. Me encanto la idea, porque, creo que lo único que nos hace crecer tanto como los libros son los viajes.
La literatura nos abre la puerta a la imaginación, pero viajar nos lo hace a la realidad imaginada. Mundos soñados y mundos vividos, tan diferentes a los nuestro,s pero tan cercanos a la vez, porque al final, en esencia, nos damos cuenta que el hombre siempre es hombre, por encima de miserias y de oropeles.
Me encanta el foro porque en él he encontrado tantas cosas por descubrir y porque compartimos mucho mas de lo aparente.
Me he considerado siempre alguien culto, pero al llegar aquí he descubierto que poquito se y cuanto me falta. Y he encontrado gente de aquellos sitios tan lejanos, que me han descubierto otros autores que que ignoraba, Maritosa chan me ha hablado de poetas que ignoraba, tan grandes como cualquiera de mis favoritos.
Me gustaría que se incorporaran mas gentes de hispanoamerica y que nos abrieran mas ventanas a la literatura a sus países. A lo mejor eso nos ayudaba a perder miedos y a unir lo que debiera ya estar unido, esa enorme cultura común que tenemos. Testigo de ello es Tom Sawyer nuestro vasco-argentino, enamorado de aquel país de su ritmo de vida, de sus gentes. Y sin embargo nadie diria que Laurana o Fio , no son de aquí, por lo próximas que las sentimos .....y tantos otros..... Sampler,Kawpie, ... recientemente Masacroso con sus brillantes aportaciones a CiFi.
De la misma forma , me encantaría visitar la Colombia que huele café, el Mejico monumental de los aztecas, los territorios habitado por los incas, la enormes llanuras argentinas, los paisajes de la Patagonia tan imponentes..... Mientras me conformare con leeros y con ver vuestras fotos para sentirme hermanada y parte de algo mucho mas grande que este pequeños país en el que vivo.

5 comentarios:

Fiorella Aramburu A. dijo...

Me has emocionado Julis!!! muy bonito!

Anónimo dijo...

En cada viaje a La Argentina siento que empequeñezco, que tengo todo un mundo nuevo que mirar, aprender y disfrutar. Conozco otra realidad, otra cultura, otra manera de estar en la vida.
Ya en los aeropuertos me esperan familiares y amigos con libros de José Hernández o Esteban Lozano. Siempre soy el agasajado, el bienvenido. Gabriela me lee a Cortázar, la única manera que tengo de poder avanzar por Rayuela, su voz sedosa y musical arropando cada palabra de la maga. Me descubre a Abelardo Castillo y sus extraordinarios cuentos. Me da a conocer a Mújica Laínez. Desde mis viajes a aquella tierra intento ahondar en Bolaño, Arlt, Coloane o Girondo. En cada viaje aumenta el número de escritores para leer.
Me gusta la vida allá. Dura y mísera para muchos, sí, pero sin el cansancio rutinario que tiene acá. La gente siente otro ánimo, otra dulzura, es cercana.
Uno de los momentos que más me gusta ocurre cuando desconocidos se paran a hablar conmigo. Extranjero pero no extraño. Escuchan mi acento y me hablan de sus antepasados españoles, de sus ganas de conocer el pueblo de sus padres, me preguntan si Salamanca es hermosa, si he estado en Galicia, si merece la pena viajar a Andalucía. También me hablan de otro pasado diferente: unos, de la época donde las grandes óperas se estrenaban en Tucumán, otros, de cuando se construyó un muro para esconder la cara y el cuerpo enflaquecido de los pobres. En cada viaje me han abierto los brazos, sin desconfianza, con una ternura y una hermandad que acongojan.
A veces siento que esa tierra es como las imágenes aquellas de Ford de mi infancia, un hombre sentado en un porche, disfrutando de una tarde calurosa.
Me ha encantado tu texto, Julia.

juliaduce@gmail.com dijo...

Gracias a ti, Tom por tu aportación

Capitán Nadie dijo...

Leeros si que es es un placer. Cómo odio tener tan poco tiempo.
Besotes y abrazos para todos
Pepe

Fiorella Aramburu A. dijo...

Muy conmovedor lo que has escrito, Tom!!